miércoles, 30 de diciembre de 2015

Por la transición a una movilidad eléctrica


Estamos en una época de fiestas navideñas y de la preparación de los propósitos para el año que viene. En estos períodos donde, por convención, definimos el final de un año y el comienzo del que sigue acostumbramos proponernos retos o definir propósitos para, después de una reflexión, cambiar o reforzar nuestros quehaceres y conseguir algunas cosas de una forma diferente a como lo hemos hecho.
El día de hoy quiero comentar sobre el aspecto de movilidad y apuntar hacia una movilidad que respete el ambiente, fomente la economía, promueva el bienestar social, es decir una movilidad sustentable.
Ya he mencionado en esta bitácora las ventajas económicas de recorrer un kilómetro usando un vehículo eléctrico. Un sencillo cálculo nos indica que el costo de recorrer un kilómetro con una vehículo impulsado con un motor de combustión interna, gasolina por ejemplo, es casi el doble que cuando se utiliza un vehículo eléctrico. En este sencillo cálculo se consideró que para cargar el sistema de baterías del auto eléctrico se paga la tarifa más cara en el mercado eléctrico mexicano, la tarifa Domiciliaria de Alto Consumo (DAC), este cálculo se realizó con la mayor desventaja posible para el vehículo eléctrico.
Hace uno 20 años se decía que los sistemas fotovoltaicos, que sirven para generar electricidad a partir de la energía solar, eran muy caros. Hoy en día estos sistemas generan electricidad a un costo menor que la tarifa DAC o la tarifa 2, esta última es la tarifa que pagan los pequeños negocios. En otras palabras, hoy en día lo que era caro es más barato Sí, la energía solar es más barata que la energía que nos vende la CFE hoy en día.
En el año 2013 la reunión de ministerios de energía y la Agencia Internacional de Energía propusieron una iniciativa para impulsar el uso de vehículos eléctrico para la movilidad. Los países que han decido apoyar esta iniciativa son: Alemania, China, Dinamarca, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia, Gran Bretaña, Holanda, India, Italia, Japón, Portugal, Suecia y Sudáfrica y pretende alcanzar los 20 millones de vehículos eléctricos rodando para el año 2020.
En México no hemos retomado esta propuesta. Parece que a pesar de los avances que se tiene en los últimos años en los vehículos eléctricos, todavía hay importantes obstáculos que se interponen en el camino de la adopción generalizada y en nuestro país esto ha pesado mucho para evitar unirse a la iniciativa. Retos tecnológicos, de mercado, y los desafíos de política financiera han dificultado la transformación del mercado de vehículos basados en motores de combustión interna. En mi opinión, la colaboración público-privada es necesaria para brindar soluciones políticas, de negocios innovadores y, así, poder migrar a un transporte menos contaminante.
Los desafíos más apremiantes para la implementación pueden ser resueltos con la colaboración de los gobiernos locales y nacionales, en coordinación con el sector privado y la comunidad en general.
México como país se ha colocado como uno de los líderes exportadores de automóviles, si deseamos que esto continúe por varias décadas la industria automotriz en general debe apuntar sus esfuerzos de innovación en generar oportunidades de negocio en los vehículos eléctricos. Para ello los retos tecnológicos están fundamentalmente en el sistema de almacenamiento de energía, las baterías, que también son el mayor riesgo contaminante.
El principal reto es el financiero, a los precios actuales los automóviles eléctricos llegan al punto de equilibrio al recorrer más de 200 mil kilómetros solamente considerando los aspectos monetarios y, por esta razón, esta distancia todavía no es atractiva. Los gobiernos locales tienen la oportunidad de impulsar la transición a vehículos eléctricos que redundaran en beneficios directos a la población al proponer esquemas de inversión en el sistema de transporte público con los beneficios adicionales de promover la movilidad masiva en lugar de la individual. Los vehículos eléctricos, por su naturaleza, son más fácilmente monitorizados con lo que la generación de datos puede ser una fuente de conocimiento importante para mejorar la movilidad sustentable.


El costo total al propietario es menor en la vida útil del vehículo eléctrico que en uno de combustión interna. Esto debido al ahorro del combustible, una eficiencia mayor, menor consto de servicios, mantenimiento y reparaciones que aproximadamente se reduce en un 30% comparado con los gastos para los vehículos de combustión interna. Además los vehículos eléctricos tienen beneficios que no son evidentes, pero que impactan en nuestra vida cotidiana.
Aquí las oportunidades de negocios pueden ser amplias y en Morelos, y en México en general hay experiencia en el sector científico. El reto en este aspectos sería cuadruplicar la capacidad de almacenamiento de energía en las actuales condiciones. Para resolver este problema el financiamiento gubernamental para la investigación puede ayudar a lograr la solución. En este sentido CONACyT ya tiene esquemas de apoyo que habría que enfocar hacia el almacenamiento de energía, por supuesto que las oficinas encargadas de los aspectos de ciencia y tecnología en los estados podrían contribuir.
Ya hace más de tres años discutía sobre la conveniencia de contar con un transporte eléctrico metropolitano en Morelos; es así como desde mi punto de vista, en el ámbito estatal una decidida apuesta por un transporte público eléctrico puede iniciarse con la convocatoria para que las universidades o instituciones de investigación y educación superior propongan alternativas innovadores tanto en el ámbito científico-tecnológico como en aspectos de normatividad, urbanismo y educación para la transición hacia una movilidad menos contaminante. Con el lanzamiento de un plan de largo plazo que incluya los cúmulos empresariales (clusters) y su articulación en el largo plazo podrá impulsar la generación de una cadena de valor que beneficiará primeramente a la población donde se instrumenten apoyos financieros para la migración del transporte masivo de combustión interna a uno eléctrico.
En Morelos podemos iniciar la transformación del sistema de transporte hacia uno eléctrico, es una región pequeña que requeriría de una inversión no tan onerosa y contamos con personal capacitado para proponer los esquemas. Además este sistema podría ser un atractor de turismo también. Empecemos a trabajar en ello.

Una versión previa de este artículo fue publicado el día 30 de Diciembre

miércoles, 9 de diciembre de 2015

Inversión en jóvenes y ciencias

Hace algunos años estuvimos viendo como nuestros jóvenes eran reclutados por las bandas de narcotraficantes para usarlos como sicarios. En Morelos tuvimos una noticia demoledora para todos nosotros con un niño, ni siquiera un adolescente, todos nos quedamos estupefactos ante esta demoledora noticia. Espero en estos momentos, aquel niño se esté rehabilitando para insertarse a la sociedad al igual que sus hermanas. A pesar de estas noticias, hoy podemos mencionar algunas noticias agradables y en estos escritos he comentado varias veces que es muy importante reconocer el esfuerzo de los jóvenes. En Morelos nuestros jóvenes trabajan y participan en las olimpiadas tanto deportivas como científicas. En el ámbito científico nuestros jóvenes morelenses han ganado ya varias medallas internacionales y nacionales. Todos estos logros merecen ser reconocidos; al mismo tiempo que el esfuerzo de sus entrenadores que los guían, aconsejan y preparan. En el caso de los equipos olímpicos en el ámbito de las ciencias se involucran muchas personas como entrenadores y requieran también de inversión de mucho tiempo en las preparaciones de los ejercicios, los diseños didácticos y finalmente en los entrenamientos de todos los jóvenes participantes.
En Morelos desde la Academia de Ciencias de Morelos (ACMor)se ha promovido la formación de estos equipos, ya desde hace más de una década. Generalmente la ACMor solicitaba apoyo a CONACyT para financiar estas actividades. Por alguna razón, una orden de hacienda o contraloría solicitó a CONACyT suspender el apoyo a actividades estatales a principios de 2013, con ello se cortó el apoyo financiero para estas actividades por parte de esta entidad nacional y la ACMor tuvo que usar otras vías de financiamiento. Por esta razón se decidió someter un proyecto al Fondo Mixto de Ciencia y entonces bajo el apoyo del la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología (SICyT) de Morelos se pudo financiar estas actividades, pero también hubo un cambio en el tipo de proyectos de apoyo de los Fondos mixtos, ahora son fundamentalmente para infraestructura, y las actividades de los entrenamientos olímpicos de ciencias ya no podía ser objeto de apoyo. Es así como para el 2016 el panorama parece muy desalentador, ya que durante 2015 la ACMor tuvo que suspender casi por completo sus actividades en este rubro. Una luz en el camino, en este año de la luz, se ve en el horizonte. La semana pasada por gestiones del Dr. David Romero Camarena, presidente de la ACMor, hubo un punto de acuerdo en el congreso local para proponer un minúsculo, pero muy útil apoyo para la ACMor. En concreto, el día 3 de diciembre el Congreso Estatal emitió un exhorto para que el Poder Ejecutivo mediante la SICyT, contemple una partida de recursos etiquetados por 2.5 millones de pesos, para financiar el funcionamiento de la Academia de Ciencias de Morelos durante 2016. Este exhorto fue aprobado por el pleno legislativo a propuesta de la Comisión de Ciencia e Innovación Tecnológica, y se dio a raíz de la solicitud hecha por la ACMor. Esta propuesta tiene que ser apoyada por la Comisión de Hacienda, Presupuesto y Cuenta Pública de este congreso.
Este financiamiento, de concretarse, permitirá continuar con los esfuerzos de un gran grupo de comprometidos jóvenes y maduros profesores en la preparación de los jóvenes olímpicos. Con esto estoy seguro seguiremos contando con premiados en las diferentes olimpiadas de Física, Matemáticas, Química y otras ramas de la ciencia. Además el financiamiento para otras actividades de la ACMor permitirá que los científicos morelenses continúen con sus actividades de divulgación y compromiso social que han llevado a cabo desde hace casi una treintena de años, para muestra vean los artículos que desde hace casi seis años aparecen en La Unión de Morelos en la sección “Y sin embargo se mueve”.
Estoy convencido de que de igual forma que el dinero invertido en la beca salario para estudiantes en Morelos por parte del gobierno estatal, este presupuesto será una verdadera inversión para construir un Morelos donde su población pueda construir su propio futuro con miras a un bienestar social trazando un camino a la sustentabilidad.
Claramente, la comunidad científica de Morelos desea y labora en propiciar que la ciencia morelense impacte en nuestra sociedad. Para ello requiere el apoyo decidido de todos los sectores, empezando con el gobierno estatal y municipales (estos últimos tienen una deuda pendiente) y el sector empresarial e industrial. Este último sector todavía no percibe que se beneficiará contando con fuerza de trabajo capacitada y preparada para enfrentar los retos del mercado global basado en innovación tecnológica a preparar a jóvenes en aspectos científicos.

Este artículo fue publicado el día 9 de Diciembre

miércoles, 2 de diciembre de 2015

Buen vivir y energías renovables

Hace una semana estuve en Quito, Ecuador, a petición de la Secretaría de Educación Superior Ciencia, Tecnología e innovación de ese país para ayudar a conformar un plan nacional para investigación en el ámbito de las energías renovables. Por supuesto que estoy convencido de que la investigación científica es un excelente motor para el desarrollo de todas las regiones del mundo y esta invitación me permitió conocer de cerca algunas realidades de nuestra Latinoamérica.
Tuve varias sorpresas en ese viaje desde la visita al templo de la Compañía donde quedé prendado de su belleza y esquistez que comparte con muchos templos de nuestro México. Recordé a Santa Prisca en Taxco y el Templo de la Valenciana en Guanajuato, todas estas edificaciones tienen encantos únicos y otros que comparten, pero todas ella nos llenan de emociones y muestran el trabajo de los antiguos latinoamericanos. Es claro que compartimos ayeres, vicisitudes, conocimientos tradicionales y por supuesto un futuro que construir.


La primera petición de los organizadores, fue que deseaban que la planeación se enfocara al “Plan del Buen Vivir” documento guía del gobierno del presidente Rafael Correa Delgado de Ecuador. Debo manifestar que de entrada me despertó un sentimiento de desánimo y cierta resistencia a iniciar la lectura de este documento. Esto debido a las experiencias que tengo de leer algunos planes de gobierno en nuestro país. Desde mi punto de vista, es necesario aclarar que dicha lectura me fue muy grata al observar que este plan contempla muchos de los aspectos que también son relevantes para el ámbito mexicano y por ende, quizá, con otros países latinoamericanos. Por supuesto que estas aseveraciones están cargadas de mis propios pensamientos que, en síntesis, comparto con el Plan del Buen Vivir (los invito a leerlo seguramente entenderán mi sentimiento de que es una buena iniciativa www.buenvivir.gob.ec).
El Plan tiene doce objetivos y en particular los objetivos 4 y 11 son los que nos indicaron tenían que ver con la Planeación específica para el Instituto Nacional de Eficiencia Energética y Energías Renovables, que fue en la que me invitaron a participar. Así el objetivo 4 consiste en: Fortalecer las capacidades y potencialidades de la ciudadania, en particular algunas de la políticas para cumplir este objetivo consisten en: alcanzar la universalidad de la educación hasta el bachillerato y democratizar el acceso a la educación superior, promover espacios no formales de educación permanente, promover interacciones recíprocas entre los sectores educativo, empresarial y de investigación, promover la gestión adecuada del uso y difusión de conocimientos generados en ecuador. Dentro de este objetivo y políticas subyace una intención que se enuncia como uno de los ejes para la sustentabilidad y mantenimiento de la biodiversidad es la de realizar investigaciones sobre el conocimiento ancestral para su verificación y uso y asegurarlo como un bien público en Ecuador. En otras ocasiones he comentado la necesidad de amalgamar el conocimiento tradicional con el científico para obtener soluciones a la problemática presente que contenga la visión hacia la sustentabilidad. Por esta razón comparto plenamente esta intención. En la definición de estas políticas estoy de acuerdo y aquí en nuestro país muchos las hemos impulsado.
En cuanto al objetivo 11 que se enfoca en: Asegurar la soberanía y eficiencia de los sectores estratégicos para la transformación industrial y tecnológica, en particular mediante la política de Reestructurar la matriz energética bajo criterios de transformación de la matriz productiva, inclusión, calidad, soberanía energética y sustentabilidad, con incremento de la participación de energía renovable, no cabe duda que la comparto y considero de suma importancia. Enfocar la seguridad energética para propiciar la transformación de la matriz productiva con la perspectiva de la sustentabilidad es una visión retadora y con miras en el largo plazo.
En este tenor es que el grupo de trabajo, integrado por colegas brasileños, venezolanos y ecuatorianos, conformamos cinco grandes propósitos para la investigación en el ámbito de la eficiencia energética y energías renovables: contribuir a construir un habitat saludable, una movilidad baja en emisiones de carbono y de calidad, una industria que sea eficiente en energía y use energías renovables donde sea adecuado, un generación de electricidad basada en fuentes renovables de energía y la definición de un plan nacional de uso eficiente de energía y energías renovables.
Claramente con estos propósitos los ecuatorianos podrán conocer que la investigación tanto básica como aplicada y el desarrollo tecnológico en estas áreas tiene intenciones de resolver problemas que le atañen. Con esta estructuración las líneas, temas y problemas específicos quedan delineados. pero lo suficientemente abiertos para que los científicos ecuatorianos generen conocimiento e invenciones en el contexto internacional. La definición de propósitos claros para el ciudadano no científico es muy importante, ya que estas personas podrán percatarse de que sus impuestos tienen objetivos últimos que los beneficiarán. Esta definición contrasta con la que se hace a menudo en nuestro ámbito científico de anteponer los propósitos investigativos y dejar para la última parte la intensión. En este sentido es mucho más claro para las personas no científicas y las científicas declaran de antemano su objetivo último.
Además les comento que la especificidad del plan es profunda y permite guiar con amplitud la investigación tanto en aspectos básicos como de desarrollo de dispositivos, sistemas, herramientas informáticas y de alternativas tecnológicas.
La interacción con colegas de otros países me permitió conocer en detalle lo que hacen y estoy seguro que pronto tendremos colaboraciones para abordar problemáticas comunes desde una perspectiva multidisciplinaria y multienfoque mezclando los conocimientos tradicionales con los que generamos en diferentes latitudes de la región lationamericana.

Una versión previa de este artículo fue publicado el día 2 de Diciembre